El alcohol es quizá de las adicciones más frecuentes ya que es socialmente aceptado. No es sencillo establecer el límite entre el abuso al alcohol y la adicción ya que la línea llega a ser imperceptible. Cuando hablamos de un uso social y hábito es más fácil hacer la diferencia; sin embargo, es importante tomar en cuenta que no estamos exentos de pasar del uso a la dependencia. Por lo que no deja de ser dañino por muchas razones.
Una situación de algo riesgo y con consecuencias complejas y dañinas es cuando ingieren bebidas alcohólicas durante el embarazo, ya que al hacerlo estamos afectando directamente al feto.
El síndrome del espectro alcohólico fetal es un grupo de condiciones que pueden presentarse en una persona cuya madre ingirió bebidas alcohólicas durante el embarazo. Los síntomas pueden incluir una apariencia anormal, baja altura, bajo peso, cabeza pequeña, coordinación deficiente, problemas de comportamiento, sordera, deficiencia visual entre otros.
No está definida una cantidad específica ni un periodo específico en que resulte segura la ingesta de bebidas alcohólicas durante el embarazo provoque daños a distintos niveles.